Este miércoles, en una nueva audiencia del Tribunal Oral Federal 1 por el asesinato de Darío Monges, se presentaron diez testigos de la defensa que aportaron detalles sobre los operativos y circunstancias alrededor del caso. Entre ellos, Alejandro Nieva, vecino del barrio El Círculo 1, ofreció un testimonio sobre el robo de una de sus cámaras de seguridad. La casa está muy cerca del lugar donde Monges fue encontrado sin vida dentro de su camioneta Ford Ecosport blanca el 3 de septiembre de 2022, con cinco heridas de arma de fuego en la cabeza.
Por el crimen son juzgados Catalino Bejarano y sus hijos David y Santiago.
Alejandro Nieva denunció el robo de una de sus cámaras de vigilancia el 6 de septiembre, días después del crimen. Nieva relató que días antes de la desaparición de la cámara, un hombre que se identificó como policía llegó a su domicilio en un vehículo, sin orden de allanamiento, solicitando retirar las cámaras de seguridad. La esposa de Nieva tomó la patente del vehículo, OIM-087, y comprobó que estaba registrada en Orán. Contó que el hombre que se identificó como policía se mostraba muy insistente.
Luego el 6 de septiembre, la familia se percató del robo de una de las cámaras de seguridad e incluso para sacarla habían movido la parte del equipo de aire acondicionado que da al exterior. Aunque Nieva radicó una denuncia formal el 7 de septiembre en la comisaría de barrio San Remo, no ha recibido respuesta hasta el momento. La policía regresó el 9 de septiembre con una orden para retirar el DVR, que guarda las filmaciones.
Nieva contó que hay otro vecino que tiene la misma camioneta en la que fue hallado Monges, por lo que en primera instancia no le llamó la atención que estuviera estacionada en la zona. Comentó luego que se enteró que se trató de un crimen y que unos niños dieron alerta del hecho.
Otra testimonio
Además de Nieva, testificó Víctor Cejas, vecino del barrio El Círculo, quien mencionó que también fue visitado por integrantes de la Brigada de Investigaciones, quienes le solicitaron las grabaciones de sus cámaras de seguridad. Cejas relató que, al igual que Nieva, hay en la cuadra una camioneta similar a la Ford Escort Blanca de un vecino apodado Tití.
Rodrigo Vigarra, cabo de la UGAP, detalló el procedimiento de recolección de cámaras en varios puntos del barrio, incluyendo la casa de Cejas, una empresa de metalurgia y un corralón. Señaló que estos operativos estuvieron bajo la supervisión del oficial Fernández, quien además lideró otro allanamiento en una finca en Los Yacones en octubre de 2032, donde se buscaban armas y celulares, encontrándose únicamente una escopeta y un cartucho
Oscar Gómez ,padrino de David Bejarano, contó que apoyó a David en su formación para abrir un taller de motos, mencionando que David es padre de cuatro hijos. El taller estaba ubicado en avenida Constitución, en la zona norte de la capital salteña, muy cerca de la casa de Catalino Bejarano.
Ignacio Aguilar, director de la escuela de Los Yacones, fue testigo en el allanamiento a una finca en esta localidad. Aguilar mencionó las condiciones extremadamente precarias del lugar y que, aunque la policía buscaba armas, solo se encontró una escopeta. Uno de los testigos dijo que Santiago solía ir a Los Yacones.
Los Bejarano
Varios testigos brindaron detalles sobre la vida y actividades de los acusados, buscando mostrar una imagen diferente de la familia Bejarano:
Néstor Quipildor comentó que mantenía una relación laboral con Catalino Bejarano ya que era chofer de su taxi. El testigo ahora trabaja en la actividad minera. Sostuvo que siempre quedan registros de la actividad del chofer en la ticketera o anotaciones que incluso tiene acceso la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT).
Ernesto Muñoz, exvecino de los Bejarano, ahora vive en Salvador Mazza, declaró por conexión virtual. Afirmó haber sido testigo civil en uno de los allanamientos y señaló que el taller de motos de los Bejarano siempre estaba ocupado, con varias motos en la vereda.
Enzo Gabriel, conocido de David “Sapo” Bejarano, relató haber presenciado un allanamiento en el hogar de David, que supuestamente buscaba un arma. Tras el operativo, recordó haber compartido un cigarrillo con David, quien se mostró tranquilo y que se quedaron después a fumar un cigarrillo. Este allanamiento se hizo de madrugada en una vivienda en el pasaje de Sarmiento y Ameghino.
Cristian Sarancho, compadre de David Bejarano, brindó detalles de la vida cotidiana de los Bejarano, describiendo a Catalino como una persona activa en la comunidad, organizador de eventos locales para el Día del Niño y el Día de la Madre. Justamente dijo que en 2022 a Catalino le tocaba encargarse de los panchos. Recordó que siempre el evento del Día del Niño se hace el primer sábado de septiembre, justo ese año cayó el día 3 (fecha en la que se encontró el cuerpo de Monges). Saracho comentó que también ayudaban en el festival los hijos de Catalino. Pero remarcó que con Catalino eran los que hacían “la punta” para hacer notas de permisos y solicitud de donaciones.
El testigo Diego Portales mencionó que fue interceptado por un policía mientras transitaba por una bicisenda en la avenida Bolivia y fue obligado a participar como testigo en el allanamiento de la casa de calle Velázquez. “Me dijeron que iba a quedar detenido si no participaba”, recordó que le dijeron. Según Portales, la casa ya estaba intervenida cuando él ingresó, y describió el lugar como humilde.
Mañana habrá una nueva audiencia con más testigos ofrecidos por la defensa de los Bejarano. Cabe recordar que el martes terminó la declaración de los testigos que aportó la fiscalía.
Fuente: El Tribuno | Policiales